Los países
asiáticos son un importante mercado emergente que ya se ha
consolidado como uno de los más importantes del mundo, tanto para la
importación como para la exportación de productos. Dentro de este
mercado, destaca especialmente la potente China, con un crecimiento
vertiginoso que la convierte es un país imprescindible para las
empresas que quieran tener éxito en el comercio internacional.
Las ventajas de la importación
marítima desde China son muchas ya que ofrece multitud de
soluciones para cualquier necesidad empresarial a precios muy
atractivos. Sin embargo, en muchas ocasiones ha habido problemas en
el transporte de mercancías ya que las normas que rigen en el país
asiático no son las mismas que aquí. Por ello, debemos tener en
cuenta dos cuestiones si queremos importar nuestros productos desde
China con garantías: es importante conocer la homologación de
nuestros proveedores y realizar controles de calidad. De este modo,
nos aseguraremos que todos los productos que nos llegan desde el país
asiático, llegan cumpliendo la normativa del país de destino de
forma que podamos comercializarlos sin ningún problema.
Si no comprobamos la homologación de
proveedores, podemos poner en riesgo a la empresa con productos que
no cumplen las exigencias y requisitos esperados. La homologación de
proveedores permite minimizar los riesgos y seleccionar los
proveedores que mejor se ajustan a las necesidades de nuestro
negocio.
Por otro lado, es muy importante
realizar controles de calidad antes de transportar las mercancías y
productos para asegurar que todo lo que se importa cumple con los
niveles de calidad que exigen las normas europeas.
La calidad de los productos fabricados
en Asia no siempre es la adecuada. Realizar controles de calidad
previos al transporte es fundamental para saber que nuestro dinero se
ha invertido en productos que vamos a poder comercializar y que nos
aportarán beneficios.
Si no realizamos estos controles, puede
que la mercancía sea de baja calidad o no cumpla con la normativa
europea, lo que provocaría la prohibición de su venta. En este
caso, habremos gastado nuestro dinero en el transporte marítimo y en
la compra del producto y no podremos sacarle provecho. Si tenemos en
cuenta estas cuestiones nos aseguraremos que la importación de
productos desde China sea un éxito y suponga beneficios para la
empresa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario